viernes, 29 de mayo de 2015

Jeju Island (XIX)

La playa

Mir llegó a la casa, se dio una ducha rápida y eligió algo cómodo para usar. Quería vestirse realmente bien para Joon pero la idea era caminar por la playa, unos shorts de baño con una remera eran la respuesta adecuada. Se miró al espejo un instante y se deseó suerte. El ascensor parecía ir más lento de lo habitual. Cuando por fin se abrieron las puertas, la sonrisa de Joon lo recibió.


- No te demoraste en lo absoluto Mir -.
- ¿Cuánto puede tardar en arreglarse un hombre? - bromeó para alejar los nervios.
- Tienes razón. Y la idea de traje de baño me parece estupenda ¿Vamos? -.
Asintió y salieron del edificio. El camino hacia la playa estaba bellamente marcado por grupos de árboles y plantas. El paisajista que había realizado eso se merecía un aplauso. Tanta naturaleza le daba la sensación de paz que necesitaba. Joon a veces le mostraba algunos puntos interesantes, otras veces se detenía, cerraba los ojos y aspiraba el aire puro. Mir hacía lo mismo, trataba de absorber la calma, la energía del lugar.
- Ya llegamos Mir - abrió los ojos.
- Es hermoso! - exclamó. Si bien había pasado por allí en cuanto llegó a Jeju, ahora estaba mirándolo con él.
- Hace mucho que no venía por aquí - extendió los brazos y sonrió -. Me encanta la arena, la tranquilidad -.
- Y el agua -.
- El agua que debe estar fría a esta hora, pero no me importa - corrió dejando tirado el celular en la arena.
Mir sonrió y se sumó al juego. Lo vio a Joon meterse al agua con ropa y todo. Él también lo hizo, no le importaba volver con la remera empapada, sólo quería aprovechar cada segundo para estar con él. Reírse mientras se arrojaban agua, competir sobre quién podía aguantar más tiempo sin salir a la superficie, el sol dándoles un poco de calor. Quería que el tiempo se detuviera en ese instante, cuando se sentía feliz y libre de preocupaciones. Lo vio acercarse a la orilla y lo acompañó.
- Mir, deberíamos secarnos un poco antes de ir a almorzar -.
- Me olvidé la toalla! - exclamó sorprendido al recordar que había salido con las manos vacías. Estaba tan apurado que lo pasó por alto.
- ¿Quién la necesita? - sonrió divertido Joon - Nos podemos acostar en la arena y dejar que el sol nos seque -.
- Pero... - hizo puchero - mi pelo se va a llenar de arena -.
- Tienes razón - se llevó el índice a la barbilla como si estuviera pensando y luego sonrió -. Se me ocurrió una idea - se quitó la remera y se la entregó - .Toma, la puedes usar para poner la cabeza -.
- Joo....joon - Mir se quedó mudo al contemplar por primera vez el torso desnudo del otro. Podía sentir cómo se le iba subiendo el color a las mejillas. Tenía una piel tostada que brillaba por el sol y unos músculos que despertarían el deseo de muchas personas. Agachó la vista y trató de decir algo - Pero, ¿tú qué vas a usar? -.
- Es grande, entran nuestras cabezas perfectamente - se encogió de hombros y le quitó la remera de las manos para acomodarla en la arena - Ven a acostarte, quiero que nos sequemos lo suficiente como para no enfermarnos - sonrió -, además, me muero de hambre - se acomodó y cerró los ojos.
Mir se agachó lentamente. Era muy difícil acomodar la cabeza en la remera de Joon sin tocar al menos el hombro de éste. Lo contempló un segundo, para no levantar sospechas, y cerró los ojos. Podía sentir cómo el calor se acumulaba en esa pequeña parte del cuerpo que estaba en contacto con él. Se sentía un tonto por emocionarse de esa manera. Pero era un tonto feliz. Estaba al lado de la persona que tenía en su corazón ¿Quién no caería a los pies de alguien tan bueno, alegre y risueño como Joon? Cuando sentía que se iba a quedar dormido vio una sombra cerca de su cara y abrió los ojos asustados. Se encontró con un rostro sonriente que lo observaba y no pudo evitar sonrojarse por la proximidad.
- Mir, ¿estabas durmiendo? -.
- A-algo así - no pudo evitar tartamudear -.
- Tienes la cara roja -.
- Es el sol, siempre me deja la piel colorada cuando estoy mucho tiempo - mintió.
- Tienes razón, a varias personas les ocurre eso. Entonces volvamos, no quiero que tengas problemas por estar demasiado tiempo expuesto al sol ¿Vamos a comer a la cafetería? - sugirió mientras se ponía la remera.
Mir asintió. Se lamentó no tener el coraje de tomarse una foto con él. Quería recordar ese momento porque no sabía si alguna vez se iba a repetir. Suspiró.

3 comentarios:

  1. Porfa actualizalo pronto me muero d curiosidad d saber q ocurrirá
    Te ruego no tardes mucho😢😢😢😢

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  2. Continua por favoooor!!! Necesito saber que pasara con mi amado Yang y con los pervertidos de Thunder y G.O. La historia esta muy buena no la dejes a medias por fa! ;) Adoro a ese Pandita ojeroso igual que yo XD jeje

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  3. Por favor, continúalo u_u
    Quiero saber qué sucede con el plan de G.O sobre tener a Thunder de espectador y eso :C

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