jueves, 4 de julio de 2013

El diario de Mir (parte 1)

Autora: Luces.


20 de mayo de 2012:
Hoy comienzo a estudiar para el parcial de Historia del Arte. Es un libro de 300 páginas y aunque sean la mayoría imágenes sigue siendo mucho. Estoy pensando en quedarme toda la semana como monje en mi casa y no salir ni siquiera a la esquina. Quiero aprobar este examen! Ah, tengo que ir al supermercado a comprar provisiones para toda la semana, así no tengo excusas para salir.


21 de mayo de 2012:
Estuve toda la mañana y parte de la tarde estudiando. Gracias al ramen que compré no tuve que desconcentrarme para cocinar. Si mi madre no estuviera en el campo, seguro me gritaría por no almorzar como se debe y luego me obligaría a lavar los platos. Yo le diría estas palabras: ramen instantáneo y palillos descartables. Acabo de recordar que tengo balcón! Me vendría bien mirar la gente pasar aunque sea desde arriba…
Casi me muero del susto! Pensé que me iba a caer! Ya me preguntaba si podría dar el examen luego de recuperarme de una caída de 10 pisos… Tuve que avisar al encargado del edificio que las barandillas del balcón estaban flojas. Llevo poco tiempo aquí, como dos meses y no había salido al balcón mucho. Afortunadamente el encargado se va a ocupar de volver a soldar todo, quería decirle que empezara la próxima semana pero sabría que si mi madre se enterara vendría de inmediato a vigilar que no me volviera a asomar. Entre mi madre y los sonidos de los arreglos, prefiero los arreglos. Al menos los últimos tenían un horario y mi madre estaría conmigo las 24 horas del día. Mañana comienzan las obras.

22 de mayo de 2012:
Aunque el encargado esté en el balcón se escuchan todos los ruidos! Incluso usé auriculares para no escucharlo pero fue inútil, sin mencionar que escuchar música me distrajo completamente del impresionismo que estaba estudiando. Y podría estudiar en mi habitación pero sólo me distraería ver mi cama tentándome a dormir. Esa hermosa cama king size que tanto insistí en tener. Me encanta tener tanto espacio para mí y rodar por toda la cama por las noches.
Esa máquina soldadora me dejó sin luz… varias veces. Me preocupé porque se me podía quemar el cargador de mi laptop así que decidí que mientras estuvieran arreglando usaría la batería interna. Aún estoy pagando esta computadora! Se me llega a quemar algo y me olvido de ella…

23 de mayo de 2012:
Me estoy acostumbrando a no escuchar los ruidos, por suerte. Lo que no me acostumbro es a estar sin Internet! Aunque es mejor ya que así no hay manera que me desconcentre. Pensando en positivo, todo esto es para que apruebe el examen, con el módem desconectado no hay nada que me impida estudiar. Sólo espero que las horas pasen rápido y pueda recordar a Degá y sus bailarinas…
Estuve hablando con el encargado y me dijo que tomaría al menos cuatro días más ya que quería soldar hasta las que no parecían flojas para asegurarse que no volviera a pasar. Le debo haber puesto una cara de cachorrito abandonado porque me sugirió que tardaría menos tiempo si traía un ayudante. Es un sobrino que tiene que estudia ingeniería y que de vez en cuando lo ayudaba. Accedí de inmediato, con tal de no escuchar los ruidos, por mí que traiga cuantas personas quiera.

24 de mayo de 2012:
Hola desconcentración, veo que has vuelto ¿Qué hago yo estudiando Arte? Debería haberme anotado en Ingeniería. Acaba de aparecer frente a mis ojos algo más tentador que mi cama! El sobrino resultó ser alguien unos años mayor que yo. Pelo color miel (teñido, me imagino), ojos grandes (tiene doble párpado como yo), unas pestañas preciosas, y unos labios… Si la mitad de los pintores lo hubieran conocido, yo con gusto podría estar estudiando las distintas técnicas aplicadas a tan hermosa criatura. Esos labios parecían más mullidos que mi almohada y seguro me daría más placer. Hice todo lo posible por estudiar pero ni Picasso era tan atrayente como la persona que estaba en el balcón. Era una lástima que usara esa máscara para soldar aunque me ayudaba a ver otras cosas como esos hombros anchos, esos brazos fuertes y esos muslos que terminaban en un trasero que pedía a gritos ser tocado. Y sin contar esa piel blanca de porcelana. Era todo lo que mi ex novio de secundaria Joon no era. Hace mucho que no lo veo desde que se puso de novio con un tal TaeYong, unos años más joven que él y que yo. A Joon siempre le gustaron los más jóvenes.
Las horas me pasaron volando y no porque Malevich fuera fácil de estudiar, me quedaba embobado mirando al sobrino. SeungHo, así se llama. Ahora quiero que las obras duren lo suficiente como para memorizar su imagen en mi mente. Una foto sería muy útil pero siempre usa su máscara cuando está en el balcón trabajando, sólo le vi la cara cuando entró y cuando se fue. Llamé a Lauren para contarle porque ella siempre me dice “cuando veas un chico lindo tienes que contármelo”. Creo que aún no supera que haya dejado a Joon. A pesar que siempre le recuerdo que teníamos dos metas distintas y eventualmente nos íbamos a separar… Y siempre lo puedo ver, gracias a los avisos por las calles. Me alegro que haya logrado ser modelo, ahora falta que comience a actuar y ya tendría sus sueños realizados.

25 de mayo de 2012:
Hoy no vino… Y eso que me puse los lentes de contacto en lugar de los anteojos que siempre uso para estudiar! Me levanté más temprano de lo normal sólo para poder arreglarme… Bueno, al menos voy a poder concentrarme en mi libro, aunque ya me falte poco para terminar el resumen.

Acabo de recibir una noticia terrible, el encargado me acaba de decir que las obras ya están casi terminadas y que sólo quedaban unas pocas cosas. Mis posibilidades de verlo se acaban de ir por el desagüe. Si sólo pudiera verlo una vez más… O mejor no, ahora necesito aprobar. En cuanto termine este condenado examen me voy a ir a bailar a algún lugar y conocer a alguien…

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