G.O vio cómo Joon, Mir y Thunder encendían la linterna y avanzaban hacia la casa. Por otro lado, el líder parecía tener problemas.
- Oye, G.O, creo que esta linterna no funciona – la sacudió y seguía sin prender - ¿Tienes otra? -.
- Oh… - sacudió la cabeza – tenía sólo cuatro -.
- No importa – se encogió de hombros y sacó del bolsillo el celular – voy a usar mi teléfono para iluminarme -.
- No hace falta – le tomó el brazo –, ya que no funciona se me ocurrió una idea -.
- ¿Cuál? -.
- ¿Por qué no aprovechas para tomar un baño relajante? -.
- ¿Y los demás? Esta parte de la casa está muy oscura y tengo miedo que se lastimen con algo -.
- Yo me quedaré a vigilarlos – le dio una palmadita en el hombro.
- ¿Estás seguro? – preguntó SeungHo aún preocupado.
- Claro que sí, además debes estar cansado por manejar hasta aquí. Subamos al segundo piso y preparemos tu baño – lo empujó ligeramente hacia las escaleras.
- Está bien – sonrió – tú ganas -.
Mir y Joon entraron lentamente en la casa con las manos extendidas para evitar chocar con algo. La oscuridad era total y las linternas hacían muy poco para dar algo de iluminación.
- Joon hyung – se acercó más - ¿No viste a Thunder hyung? -.
- ¿No entró con nosotros? – alumbró hacia varios lados pero no veía al visual maknae – A lo mejor se decidió a ir al huerto -.
- Y tampoco escucho a SeungHo hyung – susurró.
- Probablemente fue a convencer a G.O hyung que lo deje comer el postre -.
- ¿Hyung? – lo tomó apenas del brazo.
- ¿Qué pasa, Mir? – se dio vuelta para alumbrarlo.
- ¿Podemos buscar juntos? – puso sus ojitos de cachorro – Dos linternas son mejores que una -.
- Está bien, maknae. Comencemos por las habitaciones -.
Thunder fue hacia el huerto a mirar. No creía que pudiera encontrar algo pero de todas maneras buscó entre las especias que creía que la madre de G.O había plantado. Cuando se cansó levantó la vista y vio la luna llena apenas cubierta por unas nubes, luego observó el pasto y decidió que podía dar una vuelta por el campo y comprobar por sí mismo que estaban tan alejados de los vecinos.
G.O dejó pasar a SeungHo mientras trababa disimuladamente la puerta de entrada y fue subiendo al piso de arriba.
- ¿No sería mejor que te quedes abajo con los niños? – preguntó el líder.
- Primero organizaré tu baño, no creo que puedas hacerlo por ti mismo – sonrió.
- No creo que sea tan difícil – se encogió de hombros.
- Es sólo unos minutos – le restó importancia – Ve a buscar tu ropa de dormir mientras yo lleno la bañera -.
- Ok – salió SeungHo del baño.
G.O fue hasta el armario y comenzó a sacar botellitas que había logrado poner sin que nadie se diera cuenta. Una de ellas era la más importante. Sonrió mientras iba acercándose a la bañera y vertía el líquido en el agua que iba llenando. Prendió unas velas de vainilla que estaban ahí como supuesta decoración y fue tocando el líquido para probar la temperatura. Era perfecta. Cuando vio que SeungHo se acercaba le acercó una bata y se despidió para ir a cuidar a los chicos. O al menos eso fue lo que le dijo al líder.
Mir no dejaba de sostener con fuerza el brazo de Joon. Cada vez que entraban a una habitación miraba nervioso la puerta como esperando que se cerrara en cualquier momento. Aún en contra de las advertencias de G.O había intentado usar el interruptor de la luz sólo para encontrar desilusionado que no prendía. Fue alumbrando con su linterna y cada objeto parecía tener una forma aterradora. No se animaba a abrir ningún armario por temor a lo que pudiera salir, sólo se agachaba para ver si en el piso aparecía el famoso pin que lo devolvería a la comodidad de la iluminación de la casa de su hyung. Se quedó detrás de Joon cuando éste abrió el cuarto armario desde que habían entrado.
- No hay nada – suspiró Joon – Sólo un poco de polvo – sintió el pecho de Mir completamente pegado a su espalda y lo ponía algo nervioso – Mir…no hay nada en el armario -.
- ¿E-en serio? – tartamudeó el maknae mientras espiaba por el cuello de Joon.
- Si… sólo polvo – escalofríos comenzaron a recorrer su cuerpo al sentir la respiración de Mir haciéndole cosquillas en el cuello – Nos queda una habitación y luego podremos ir hacia el living y el lavadero -.
- S-si – se separó el maknae y luego se quedó quieto – Hyung…e-escuché un ruido
- se tapó la cara con las manos.
- ¿Qué ruido? Debe ser el viento que se coló por alguna puerta. Tranquilo – le tocó el hombro.
- Tengo miedo – los ojos de Mir estaban húmedos.
- No va a pasar nada – le revolvió el pelo para animarlo –, además estoy contigo, no te preocupes – le sonrió –. Mejor sigamos buscando así podremos irnos más rápido de este lugar -.
G.O bajó a la cocina y sacó de un armario una tablet. Luego de filmar Ghost le había empezado a interesar los juguetes de espionaje así que instaló algunas camaritas ocultas mientras todos pensaban que estaba ocupado con la cena. Pudo comprobar que Mir y Joon estaban juntos revisando las habitaciones y ya se acercaban a la sorpresa que le tenía preparado. Thunder por su parte trataba de salirse de los terrenos justo como lo había pensado, para él también había otro regalito. Fue hasta el controlador de electricidad de la casa y se preparó para el evento principal.
SeungHo se sacaba la ropa tranquilamente y la acomodaba prolijamente sobre un mueble cerca de la bañera y encima la bata que le había dado G.O. Los pelos de la nuca se le erizaron de repente y se dio vuelta. No había nadie. Fue hasta la puerta y la encontró cerrada como la había dejado. Frunció el ceño. Decidió restarle importancia y volvió hacia la bañera. Fue metiendo un pie en ella para comprobar la temperatura y luego el otro. Aún tenía la sensación incómoda que alguien lo espiaba. Se metió del todo en el agua y cerró los ojos para tratar de alejar esos pensamientos. Cuando los volvió a abrir se dio cuenta que ya no había luz y el baño estaba sólo iluminado por las velitas ¿Se había descompuesto la luz también? Quiso salir del agua para ir a ver el problema pero el agua estaba tan deliciosa que optó por quedarse a disfrutar. Ya saldría e iría a arreglar todo.
Thunder paseaba tranquilamente. Los arbustos que rodeaban el terreno estaban cada vez más cerca. Algo parecido a una luz apareció a la derecha e inmediatamente iluminó en esa dirección sólo para encontrar un gatito negro que lo miraba desafiante. El visual maknae trató de acercarse sigilosamente pero el gato adivinó sus intenciones y salió corriendo hacia los arbustos. Thunder fue en esa dirección, decidido a hacerse amigo del gatito negro y olvidándose por completo del juego.
Mir iba caminando detrás de Joon rumbo a la última habitación. Luego de haber escuchado el ruido estaba más alerta que nunca, tanto que podía escuchar hasta la respiración de su hyung. Se metieron sigilosamente y se agacharon para iluminar el piso.
- Mir – susurró Joon – creo que veo un pin en la esquina -.
- ¿Dónde? – preguntó mientras trataba de iluminar donde apuntaba la otra linterna.
- Ahí – volvió a señalar –. Quédate aquí que voy por ella – trató de avanzar.
- Hyung – apretó el agarre – no me dejes aquí -.
- Ya vengo – trató de deshacerse del agarre.
- Es muy leeejos – hizo puchero – Este cuarto es muy grande -.
- ¿Quieres que vayamos juntos? – suspiró Joon dándose por vencido.
Mir asintió y siguió agarrado mientras caminaban lentamente hacia la esquina donde estaba el pin. Cuando Joon lo tomó sintieron una corriente pasar y la puerta se cerró de golpe. Mir corrió hacia la puerta y trató de abrirla en vano. Joon se acercó y también lo intentó, sólo para obtener el mismo resultado. Se habían quedado encerrados sólo con las linternas.
SeungHo se sentía absolutamente relajado gracias a las sales y el aroma de vainilla. Creyó oír un portazo a lo lejos pero le restó importancia. Ya no le importaba ni la ausencia de luz eléctrica. Minutos después abrió los ojos y aspiró el aroma. Unos golpecitos en la puerta hicieron que diera vuelta la cabeza en esa dirección.
- SeungHo, ¿todo bien? – preguntó G.O mientras entraba en el baño.
- Todo perfecto, no me había sentido tan relajado en años – sonrió - ¿Cómo va el juego? -.
- Hasta ahora ninguno apareció pero está todo tranquilo -.
- Qué bien – dio vuelta la cara y volvió a cerrar los ojos.
- SeungHo -.
- ¿Sí? – murmuró sin molestarse a mirar a su mejor amigo.
- Voy a usar la ducha por un momento, espero no te importe -.
- Está bien, no hay problema -.
- Oye, olvidé decirte que te traje un jugo que acabo de exprimir – le dejó el vaso al lado de una de las velitas – Ahora sí me voy a duchar -.
- Ok – agarró el vaso y comenzó a tomar el contenido.
G.O sonrió mientras iba hacia la ducha y se quitaba la ropa. Thunder seguía persiguiendo al gato y había encerrado a los otros dos. Todo estaba saliendo como lo había planeado.
Mir había sacado la sábana que cubría la cama de la habitación en la que estaba y se había acurrucado en el centro. Las ventanas tenían rejas y no podían salir por ellas y Joon seguía intentando abrir la puerta empujándola sin resultado. Oía rugir el viento y temblaba.
- Esta puerta es más dura de lo que parece y no traje mi celular. Supongo que cuando sea medianoche G.O hyung vendrá a buscarnos – suspiró y vio a Mir hecho una bolita así que se acercó a la cama –. Mir – vio que no le respondía y se sentó al lado de él – Mir, tranquilo, no pasa nada -.
- Hy-hyung – levantó la cabeza – tengo miedo, escucho muchos ruidos – volvió a esconder el rostro entre las rodillas.
- Ya te dije que sólo es el viento – le dio un tímido abrazo.
- Hy-hyung – lo miró con lágrimas queriendo asomarse.
Joon no pudo soportar ver al maknae tan frágil que le dio un beso a cada ojo mientras le sonreía – No debes llorar – le dio un beso en la nariz mientras notaba que se ponía rojo.
Mir se olvidó de los ruidos en el momento en que lo labios de Joon se iban acercando a los suyos. Cerró los ojos y él mismo acortó la distancia, abrazándolo más fuerte.
Thunder había llegado a los límites del terreno y se dio vuelta. La casa apenas se veía y frunció el ceño al darse cuenta que todas las luces estaban apagadas ¿Se habrían ido a dormir? Consultó el reloj. Faltaba una hora para medianoche. Un ruido a su derecha lo alertó y se dio vuelta para encontrar al mismo gatito mirándolo. Ya volvería a la casa con el gatito en brazos.
SeungHo empezó a sentir calor, mucho calor. Y no precisamente por la temperatura del agua. Escuchaba el ruido de la ducha y la dulce voz de G.O cantando bajito “Even in my dreams”. Cerró los ojos para tratar de calmar su cuerpo cuando una imagen de G.O desnudo bañándose y cantando inundó su mente. Podía sentir cómo se iba excitando a cada momento. Metió la cabeza en el agua para tratar de borrar la imagen. Era una situación muy vergonzosa, si su amigo llegara a darse cuenta del estado en el que estaba o peor, si se enterara que la erección que tenía se debía en parte al cuerpo desnudo y mojado que se estaba imaginando no sabría qué podría pasar. Tan ensimismado estaba que casi le da un ataque cuando una mano lo tocó.
- SeungHo, ¿estás bien? – preguntó G.O.
- Me pegaste un buen susto – miró a su amigo y se dio cuenta que tenía gotitas recorriendo su cuerpo y perdiéndose en una diminuta toalla que estaba agarrada en las caderas. Tragó saliva.
- Perdón – se disculpó - ¿Está linda el agua? – observó que la mayoría de la espuma se había desvanecido – Se está yendo la espuma -.
- ¿Sí? – miró el agua y se dio cuenta que casi nada tapaba su desnudez bajo el agua. Todavía estaba excitado y se puso colorado al percatarse que su amigo podría notarlo. Se tapó rápidamente con las manos, haciendo que el agua se moviera, salpicando un poco a G.O.
- ¿Qué pasa? – preguntó con fingida inocencia.
- Na-nada – evitó la mirada.
- ¿Por qué tartamudeas? – se acercó hasta quedar a la misma altura de la cara del líder – Estás colorado – bromeó.
- E-es el calor – contestó rápidamente.
- A ver… - con una mano tocó el agua y fue deslizándola cerca de lo que estaba ocultando el líder con las manos – ¿Por qué te tapas? Ambos somos hombres, no es nada que no haya visto – sonrió de lado.
- B-bueno – SeungHo estaba cada vez más nervioso. Por un lado tenía a un casi desnudo G.O cerca de su cuerpo y por el otro el conocimiento que iba a ser descubierto. El calor que sentía comenzaba a nublarle los sentidos y soltó lo primero que se le ocurrió - ¿Quieres unirte? -.
G.O volvió a sonreír mientras se sacaba la toalla y alejaba las manos de SeungHo para posicionarse en su regazo. Podía ver los ojos del líder llenos de lujuria y se acercó lentamente a sus labios. Cada centímetro era un paso más cerca de realizar su fantasía más profunda. Comenzó a besarlo lentamente hasta que el estado de excitación de ambos hizo más urgente la danza de lenguas y manos.
Cuando se hizo la medianoche Thunder tenía el gatito en las manos e iba caminando lentamente hacia la casa. Su hyung favorito le había dicho que si a la medianoche no veía luz en ninguna parte de la casa significaba que su plan había resultado. Él esperaba que así fuera porque si no llegaba a funcionar la cantidad de afrodisíacos que habían comprado para Joon y SeungHo, entonces era un caso perdido. Se acercó al auto y lo abrió. Buscó un cartón de leche y le sirvió un poco a su nuevo amigo. Un rato después el gato comenzó a maullar y le abrió la puerta para que saliera. Por el rabillo del ojo le pareció ver algo que se movía detrás de un árbol pero cuando quiso verlo bien ya había desaparecido, igual que el gato negro. Una ráfaga de viento le despeinó el pelo y sintió escalofríos. Encendió el mp3 del auto. Nada iba a asustarlo, nada.
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