Games (V)

Las consecuencias de ser curioso

G.O fue al lobby del hotel a esperar a sus amigos. Tenía que hacer lo que fuera para que SeungHo no se encontrara con Joon. Sabía que a duras penas había convencido a su mejor amigo para que no se acercara a Joon y que lo mejor era dejarlo todo en sus manos. Era una suerte que le tuviera tanta confianza. Se levantó del sillón cuando los vio llegar.
- Hyung! – se le tiró Mir para abrazarlo.
- Ya, Mir – trató de apartarse de él mientras veía que SeungHo lo miraba.
- ¿Por qué no vino Joon hyung con nosotros a desayunar? – preguntó Thunder.
- Tomó mucho anoche y se quedó a desayunar en el hotel – miró al líder – pero prometió almorzar con ustedes y llevarlos de paseo -.

- ¿En serio? – Mir estaba asombrado.
- Sí, ahora vayan a la habitación de SeungHo que ahí está – les dijo a modo de despedida – tengo que arreglar algo con el líder -.
- Saben que Joon no tiene mucha paciencia – les advirtió SeungHo – así que pórtense bien si no quieren terminar abandonados en el medio de la ciudad y no cuenten conmigo para ir a buscarlos -.
- Sí, hyung – dijeron los maknaes antes de tomar el ascensor.
SeungHo los vio tomar uno y se dio vuelta hacia G.O – Dime -.
- Todo arreglado – le sonrió.
- ¿Estás seguro? – dudó el líder.
- Primero parecía desconfiado pero luego se convenció solito – se encogió de hombros – Bueno, olvidémonos de Joon y salgamos a divertirnos mientras él queda de niñera -.
- ¿Podrá hacer eso? – murmuró SeungHo.
- ¿Por qué lo dices? -.
- Tú sabes…ayer le di una pastilla…pero el efecto ya se debe haber ido – estaba colorado.
- Le puse una en el jugo – lo tranquilizó – Así que no te preocupes más y disfrutemos de la ciudad -.
En cuanto terminó de bañarse ya tenía a Thunder y Mir esperándolo en la puerta. Mientras ellos caminaban hablando entre sí por la calle, él pensaba en lo que le había dicho G.O. Lo que le había contado tenía más sentido que el recuerdo de él teniendo sexo con el líder. De sólo pensar en eso sentía que le subía el calor y la piel le hormigueaba. Nunca había tenido sexo con un hombre... ¿Cómo podía soñar algo tan vívido, tan real? Simplemente algo no cuadraba. 
- Joon hyung, vayamos a comer a un restaurant italiano – señaló Mir un cartel.
- Sí, sí, quiero comer spaghettis – añadió Thunder.
- Queda decidido entonces –.
SeungHo y G.O salieron a caminar por su cuenta. Recorrieron varias tiendas y G.O se hizo de unos anillos nuevos y el líder de una cadena. Se sentaron en un lugar a comer y charlaron tranquilamente. G.O siempre lograba distraerlo de sus preocupaciones y eso le gustaba mucho. Sin darse cuenta habían pasado casi toda la tarde disfrutando de la ciudad y sacando muchas fotos. Volvieron al hotel cansados pero contentos. El manager los recibió dándoles los horarios del día siguiente así que fueron directo a su habitación a discutir y arreglar el entrenamiento.
Joon estaba muerto. Casi literalmente. Los maknaes lo habían cansado al dar vueltas por todos lados. Entraron a casi todas las tiendas que veían, se probaban ropa y tomaron helado. Tenían demasiada energía para su gusto. Llegó a la habitación que pertenecía a G.O y se recostó. No pensaba en la cena y sólo quería dormir. Se estaba sacando los pantalones cuando del bolsillo cayó una tarjeta de habitación. Se dio cuenta que era para entrar al cuarto del líder y recordó que la actitud de G.O le había resultado bastante sospechosa. Miró el reloj del celular y calculó que en media hora sus hyungs iban a salir a cenar con Thunder y Mir. En el momento en que saliesen, él iba a meterse en la habitación de SeungHo.
G.O había logrado que su mejor amigo se relajara luego de toda la tarde y ahora estaba cenando como siempre con los niños. A veces le resultaba gracioso cómo SeungHo trataba a Thunder y Mir como si fuera sus propios hijos. Se veían muy cansados luego del paseo así que ni siquiera comieron postre y se fueron directo a la habitación que compartían. Luego de hablar un poco más y tomar una cerveza decidieron que ya era hora de ir a dormir también. En cuanto SeungHo cruzó la puerta de su habitación, G.O lo apretó contra la pared.
- G.O – dijo sorprendido.
- SeungHo – le lamió el cuello –, hoy es nuestro último día libre.
- ¿Tienes ganas? – preguntó algo excitado.
- ¿Qué crees? – le susurró en la oreja mientras le lamía el lóbulo.
SeungHo lo miró a los ojos y comenzó a besarlo apasionadamente mientras sentía que el otro se apuraba por sacarle la remera y conducirlo a la cama. Comenzó a recorrer la piel de G.O con sus dedos hábiles, buscando los pezones para pellizcarlos mientras el otro profundizaba el beso y dejaba escapar un gemido por el placer. Se quedó rápidamente sin pantalones y fue arrojado a la cama. G.O se ponía sobre él y comenzaba a mordisquearle el cuello, luego la clavícula e iba bajando hacia los pezones. Empezó a gemir cuando sintió que la lengua de G.O los rozaba y se arqueaba de lo bien que se sentía. Le acariciaba la espalda y lo obligó a detenerse para sacarle la remera, lo siguiente fueron los pantalones.
Joon escuchó que la puerta de la habitación se abría y se mantuvo oculto en el baño tratando de no hacer ningún ruido. Pegó su oreja en la puerta y primero no escuchó nada, luego algo que lo paralizó ¿Esos eran gemidos? Entonces, lo que supuestamente iban a hacer esta noche era mirar una película porno. Bueno, eso no era nada nuevo, más si se trataba de G.O. Decidió abrir un poco la puerta para espiar qué tipo de película estaban viendo. Cuando la abertura le dio oportunidad de mirar, toda la sangre le fue a las mejillas. Ahí estaban los dos, G.O acostado con las manos en las caderas de SeungHo mientras éste lo montaba, con los ojos cerrados y gimiendo de placer.